POLÍTICA DE LA CALIDAD: 

La Dirección se compromete a implementar y mantener un sistema de gestión de la calidad basado en la norma ISO 9001:2015. Nos comprometemos a cumplir con los requisitos legales y otros requisitos aplicables, buscando constantemente la mejora continua de nuestros procesos, para lograr la plena satisfacción de nuestros clientes.

Asimismo, nos comprometemos con nuestros proveedores, aportando relaciones basadas en la confianza y el beneficio mutuo, fomentando así la durabilidad de dichas relaciones. Con nuestro personal, nos comprometemos a brindar estabilidad laboral y una remuneración justa, así como a crear un entorno de trabajo agradable y seguro que promueva su compromiso y motivación.

MISIÓN:

Nuestra misión es ser la principal empresa dedicada a ofrecer indumentaria y accesorios de fabricación 100% nacional. Nos esforzamos por crear un ambiente acogedor donde la moda se fusiona con la comodidad, y donde cada cliente se sienta valorado, escuchado y cuidado en cada interacción con nosotros. Nuestro objetivo es no solo vestir a las personas, sino también elevar su confianza y estilo personal a través de la adaptación de nuestras prendas y servicios a sus necesidades, estableciendo así relaciones duraderas y significativas con nuestros clientes.

Para lograr esta misión, nos enfocamos en la cuidadosa selección de telas, texturas, materiales, formas, modelos y acabados en nuestros productos, manteniendo altos estándares de calidad en cada etapa de la fabricación, impulsando la industria nacional, apoyando a los productores locales y fomentando el empleo en nuestra comunidad.

VISIÓN: 

Somos una marca líder y ampliamente reconocida en la confección de indumentaria y accesorios de calidad, a nivel nacional. Aspiramos a expandirnos y llevar a cabo nuestra excelencia artesanal al mercado global, posicionándonos como una marca distintiva y de renombre en todo el mundo, siendo referentes de nuestras raíces culturales, destacando la autenticidad y el espíritu de nuestra marca a través de cada uno de nuestros productos.

MANIFIESTO DE TRANQUERA

Sin dudas en los orígenes de la Banda Oriental, en los albores de la patria. Apretadas en las valijas de los turcos mercachifles y los comerciantes ingleses; en los vascos más tarde. El bombacho o bombacha llegó a reemplazar al chiripá y se quedó para siempre en el atuendo criollo. El poncho en cambio parece haber nacido de las entrañas mismas de la América antes aún de la llegada de los españoles: el “unca” fue el primero por estas latitudes. Después, el calamaco, el pampa, el patria. Fue a fines de 1800 que nació la alpargata. Y entonces de algún modo esta trilogía básica pasó a conformar el atuendo original de nuestros criollos. Pasaron años, siglos, guerras, chirinadas y patriadas. Europa hizo lo suyo; la Revolución Industrial ya había cambiado el sentido del mundo. El hombre conquistaba y crecían ciudades como tacuruses. La modernidad brotaba como una primavera indescifrable.

El confort empezaba a estirar sus caricias. La Segunda Guerra Mundial nos volvió ricos por un rato. Después todo cayó. Ya no valió la vaca ni cotizaron alto los vellones. Los fierros de las marcas se enfriaron. Y reponer un hilo era hazaña. Fue en esos lustros duros, donde todo fue poco, menos la entereza de nuestros mayores. Ahí se vio la raza. La tierra fue lo único de que se disponía; la tierra y el trabajo. Los brazos duplicaron esfuerzo, las cinturas se apretaron las fajas y la esperanza se sentaba a la mesa cada día junto con la escasez. Crecimos del ejemplo de lo digno. De la abundancia que sólo da lo poco. Y un día, ya muchachas como quien quiere zurcirse los recuerdos empezamos a remendar unas bombachas de trabajo. Compramos tela y nos hicimos una para ocasiones especiales y luego otra que alguien nos encargó. Y jugando un juego de ilusiones le pusimos la marca. Y era la marca del fierro del abuelo, la misma que había chamuscado tantas ancas. Y llevados del ejemplo del viejo cuando volvía airoso de la chacra, hicimos de Tranquera una consigna: cosechar a veces, sembrar siempre.

Lucía Goday